Sello IA

IA moda o realidad

No hay duda de que estamos en la era de la IA, pero ¿es una moda o una realidad que ha venido para quedarse? Todos los que estamos en la industria, y los que no, seguimos con atención todos los movimientos que se producen alrededor de este fenómeno. Y aunque en el sector tech siempre hay mucho hype, modas rápidas y pasajeras, todo parece indicar que la ola de la IA también barrerá a los más escépticos.

La IA no es tan reciente como se cree. Hace casi 70 años que John McCarthy definió a la IA como la ciencia e ingeniería de hacer máquinas inteligentes. Y durante todo este tiempo hemos visto diferentes avances que en la última década han acelerado de forma vertiginosa. En 2012 se popularizó el Big Data y la frase de que los datos son el nuevo petróleo. Pero no ha sido hasta la aparición de ChatGPT que lo hemos visto claro.

El mercado necesitaba tiempo para asimilarlo. Aparecieron las primeras aplicaciones, y las pruebas de concepto empezaron a integrarse en entornos de producción reales. Pasamos de ideas a soluciones de forma muy rápida. Y aunque la IA generativa no aparecía en ningún roadmap, Sam Altman y su equipo en OpenAI, hicieron que hoy la principal apuesta estratégica tenga una etiqueta IA.

Los gigantes tecnológicos se han lanzado de cabeza siguiendo la estela de un renacido Microsoft. Google, Meta, Amazon… todos quieren su parte del pastel. Copilot consiguió en solo dos años ser utilizado por el 90% de los desarrolladores. Las consultoras lanzan nuevas predicciones midiendo el impacto en los negocios (Goldman Sachs avisa del riesgo de una cuarta parte de los puestos de trabajo de la Eurozona). Y los gobiernos empiezan a desarrollar regulación para controlar su uso potencial.

La IA se incorporará de forma imparable en todas las organizaciones. Se extenderá de forma capilar, abarcándolo todo, generando una nueva realidad, social y empresarial. Y en MelmacIA seguiremos desarrollando soluciones para que nuestros clientes no corran el riesgo de quedarse en una evidente desventaja respecto a la competencia. ¿Quieres saber como?